02-07-2010

Iba con mi jugo de frambuesa en la mano.

Me tope con mi amiga, se encontrarían por el mismo lugar en el que yo estaba.

En realidad pareciera que todo el mundo lo haría, era como si todos estuvieran exactamente en ese mismo lugar.

Había caos.

Decidí acompañarla, era en buena onda.

Verlos saludarlos y seguir mi camino.

Tu amigo te confirmo que era yo y te falto poco para salir corriendo, de hecho un trote creo que seria lo exacto que hiciste.

No entendía nada.

Que había pasado?

Me entero de cosas que te han llegado sobre mi, cosas de gente que quizás ni me conoce.

Me entero de comentarios, de hechos y de opiniones que no valen.

Me desanimo.

Que puedo hacer. El día esta extraño.

Creo que por un instante te seguí, luego perdí mi vuelo y mi entusiasmo.

En algún momento nos volvemos a encontrar y por algún motivo importante estamos prendiendo velas, pidiendo deseos de desesperación.

Luego de un comentario y de un clic que hace tu cerebro todo se aclara.

Todo lo que piensas esta mal.

Yo no hice nada.

Yo nunca he hecho nada.

Tus pensamientos equívocos se dan a entender, no se si por completo, no se si fue solo dejar atrás.

Siento tus brazos en mi cintura.

Tu pecho apretado a mi espalda.

Tu pera en mi hombro.

Soy capaz de sentir cada uno de tus sentimientos sin palabra alguna, eres capaz de sentir cada uno de los míos.

La emoción se apodera de nosotros, las lágrimas son incontrolables y agradables a la vez.

Un alivio tan grande en el pecho, una entrega mutua, sincera, entera.

Nos miramos de frente y no hay nada que hablar, que escuchar.

Una sonrisa noble es nuestra recompensa y como si fuera poco a un metro de mi aparece mi ser mas amado.

Al parecer mis plegarias fueron escuchadas y me han dado la oportunidad de tenerte una vez mas junto a mi.

De poder despedirme o quizás decir hasta pronto.

Corro a sus brazos.

Le digo cuanto lo extraño, la falta que me hace, lo mal que estoy desde que se fue, que espero no haberlo defraudado con mis decisiones.

Que me hacia tanta falta abrazarlo.

Lo aprieto tan fuerte, con tantas ganas.

Lo beso en la frente.

Mi llanto es imparable, mis emociones ya no llegan a más.

Mi corazón va a explotar de felicidad, no quiero que este momento termine.

Mis palabras quedan nulas ante tanto sentimiento.

Agradezco con todo lo que tengo ese momento, ese abrazo indescriptible.

Me tiro sobre ti.

Me deshago en ti.